¿Debe la Educación para la Ciudadanía formar parte del currículo escolar? En el presente artículo, se describe cómo forma parte del currículo en muchos países, por qué ha sido difícil establecerla en el nuestro y la propuesta actual de la LOE. Además del área o materia, conviene incidir en la labor conjunta del Centro, en la acción tutorial y en la actuación comunitaria con las familias y el municipio.

Autor: ANTONIO BOLÍVAR. Catedrático de Didáctica y Organización Escolar. Facultad de Ciencias de la Educación. Universidad de Granada

   Asistimos desde los noventa a un creciente interés, tanto desde la teoría ética como desde las políticas educativas, por la Educación para la Ciudadanía, en respuesta a la necesidad de contribuir a formar ciudadanos más competentes cívicamente y comprometidos, mediante la participación, en las responsabilidades colectivas. No son las estructuras formales de una democracia las que le dan fuerza y estabilidad, sino las virtudes cívicas y participación activa de sus ciudadanos.

   La ciudadanía puede, además, ser un modo de conciliar el pluralismo y la creciente multicultural en nuestra sociedad. De ahí la importancia de su cultivo en la educación.

   Conscientes de su relevancia, muchas políticas educativas la incluyen en sus agendas de reforma; por su parte, los organismos internacionales le dedican crecientemente una amplia atención en sus orientaciones. Así, entre los objetivos de los sistemas educativos de la Unión Europea para el año 2010 se incluye: "velar porque entre la comunidad escolar se promueva realmente el aprendizaje de los valores democráticos y de la participación democrática con el fin de preparar a los individuos a la ciudadanía activa".

   Por su parte, el Consejo de Europa ha declarado el año 2005 como el "Año Europeo de la Ciudadanía a través de la Educación", bajo el eslogan "Aprender y vivir la democracia", invitando a los Estados miembros a un conjunto de acciones para promover una ciudadanía activa y una cultura democrática.

   Por último, en España, la nueva Ley de Educación crea una nueva área o asignatura dedicada a la Educación para la Ciudadanía.
         LA EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA EN EL CURRÍCULUM En un primer nivel "resulta necesario resaltarlo" las diversas áreas (en Primaria) o materias (en Secundaria) contribuyen con sus propios contenidos a la Educación de la Ciudadanía, pues llegar a ser un ciudadano, sin riesgo de exclusión, implica tener las competencias (de comprensión lectora, matemática, científica o nuevas alfabetizaciones), sin las cuales no llegará a tener plenos derechos en la vida y en el trabajo. A este nivel, en primer lugar, habrá que repensar el diseño de las áreas y materias, especialmente en Secundaria, para que se de una formación más integrada en ámbitos de conocimientos.

   En segundo lugar, habrá que velar especialmente porque todos los ciudadanos tengan asegurado su derecho a la educación, en el sentido "democrático" de acceder al currículum común, básico o indispensable para promover la integración activa de los ciudadanos en la vida social.